Me levanté a las seis de
la mañana, escribí un poco en mi libro, encendí unos inciensos, hice lo
que debía hacer y me preparo para tomar desayuno a las ocho. Es muy
extraño pero no tengo sueño a pesar que dormí apenas tres horas. Creo
que me voy a acostar de nuevo hasta que sea la hora del almuerzo. Me
gusta escribir en esta bitácora donde a lo mejor alguien lee y se
identifica con lo que yo vivo. (Después de todo los seres humanos no
somos tan diferentes unos de otros). Anoche a las doce nos abrazamos con
mi señora, brindamos con un trago de champagne, vimos los fuegos
artificiales, desde el balcón, y nos acostamos... Empezó el año...
Eso...