Me sucede que a veces tengo muchas ganas de quedarme quieto pero no sé
cómo se hace eso. Quisiera parecerme a una piedra y a un árbol, que sólo se
mueve al impulso del viento pero que jamás abandona su lugar. Entonces me
sucede que descubro que soy igual a todas las cosas y no veo diferencias en mí.
Tal vez no puedo quedarme quieto como la piedra ni puedo moverme al impulso del
viento como los árboles y entonces me sucede que descubro que no soy igual, que
no me parezco y me da pena porque quisiera parecerme. Parecerme a todas las
cosas y ser el Todo grande donde está todo porque todo es igual. Entonces me
sucede que me veo escribiendo estas palabras y no sé si la piedra escribe.